Teniendo Acceso a la Vida con Precisión

Entré a ver al oculista diciéndole que tenía conjuntivitis. Estaba segura de que conocía mis propios síntomas. Ese mismo día, tuve un dolor en el brazo que se extendió a mi muñeca y fui a ver a un médico diferente, diciéndole que tenía el síndrome de túnel carpal. En ambos casos, estaba equivocada. El oftalmólogo dijo que no había señales de conjuntivitis. Todo lo que necesitaba eran gotas para ojos secos, y el ortopedista dijo que tenía un nervio pellizcado en el hombro por haber andado cargando un bolso pesado todo el fin de semana.

Hoy me pregunto si tú también has sacado conclusiones porque estás convencida de que sabes más. Cambié mi punto de vista después de buscar la opinión de aquellos con más experiencia que yo para evaluar mi situación. La Biblia nos enseña a buscar consejo en lugar de confiar demasiado en nuestros propios puntos de vista. ¿En quién confías para ofrecerte una opinión objetiva que honre a Dios?

Cuando oro por tí, escucho una canción de victoria. Creo en tí porque creo en el poder de la verdad de la Palabra de Dios en tí, cuando pones Su verdad en acción.

Con cariño de Anita Carman

Cuando Esperar Se Vuelve Más Fácil
Vive Maravillada

Related Posts

No results found.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Fill out this field
Fill out this field
Please enter a valid email address.