¿Te encuentras molesta por cambios que no esperabas? Con toda tu planificación y preparación, ¿te tomaron por sorpresa? Incluso para alguien como David, que era rey y tenía más recursos que una persona común, aprendió con qué podía contar y en quién podía confiar. Su confianza no estaba en su ejército, ni en aquellos que proclamaban amarlo, ni en ninguno de los bienes de su reino. Él dijo en el Salmo 21:7, “El rey confía en el Señor, en el gran amor del Altísimo; por eso jamás caerá.” Si te encuentras molesta, ¿necesitas redirigir tu fe en Dios?
Cuando rezo por ti, “escucho” una canción de victoria. Creo en ti porque creo en las verdades de Dios en ti cuando pones Sus verdades en acción.
Con cariño de Anita Carman